El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 30 de Madrid ha ordenado la paralización inmediata de las obras del nuevo parking que el Real Madrid estaba construyendo en las inmediaciones del Santiago Bernabéu. Esta decisión supone un duro golpe para el club blanco, que ya había enfrentado la cancelación de varios conciertos programados en el estadio hasta finales de año.
La noticia, revelada por El Confidencial, se origina de una sentencia emitida en mayo tras la denuncia presentada por la Asociación Vecinal de Perjudicados por el Bernabéu (AVPB), argumentando que el acuerdo entre el Ayuntamiento de Madrid y el club beneficiaba únicamente a este último.
Pese a la sentencia inicial, el Ayuntamiento y el Real Madrid decidieron continuar con las obras mientras recurrían la decisión judicial. Sin embargo, ese recurso ha sido desestimado, y el juzgado ha instado al Ayuntamiento a detener las obras de inmediato. El aparcamiento estaba proyectado para ubicarse en el Paseo de la Castellana y la calle Padre Damián, y aunque su carácter iba a ser público, sería construido y gestionado mediante concesión por el Real Madrid.
La Cadena SER ha desvelado detalles del auto judicial, que argumenta que permitir la continuidad de las obras podría ocasionar “una situación de difícil o imposible reversión” en caso de que la resolución final favoreciera a los demandantes, lo que obligaría a devolver los terrenos a su estado original. Esto añade aún más incertidumbre a un proyecto que el club consideraba estratégico para la modernización del estadio.
El Real Madrid y el Ayuntamiento disponen ahora de un plazo de 15 días para presentar un nuevo recurso de apelación, intentando salvar un proyecto que resulta esencial para las operaciones del club y su entorno. Este aparcamiento formaba parte de la transformación que el Bernabéu está experimentando, con vistas a convertirse en un recinto multifuncional de referencia mundial.
La sentencia ha generado reacciones encontradas en la capital. Por un lado, los vecinos afectados celebran la decisión judicial, mientras que en el club blanco y el Ayuntamiento reina la preocupación ante el revés, que podría suponer un importante retraso en los plazos de finalización de las obras del estadio. El impacto económico y logístico de esta paralización también añade una capa de complejidad a un proyecto que ya ha sufrido varios contratiempos en los últimos meses.
